“Necesitamos que nos escuchen. Cada vez que salimos a la calle tenemos miedo que nos pase algo”, dijo Mariela, estudiante de Derecho de la UNNE. Fue una de las estudiantes universitarias que se autoconvocó ayer por la tarde frente al nuevo complejo deportivo de la universidad –avenida Libertad, calle UNNE-. Allí estaba el gobernador de la provincia junto al rector de la UNNE cortando cintas en el acto oficial de inauguración del complejo deportivo.
 
El despliegue policial fue descomunal: divisiones especiales motorizadas, caballería y drones, para evitar que el reclamo de los y las estudiantes llega al mandatario provincial.
 
Los jóvenes explicaron que los ataques, muy violentos como arrebatos y robo a mano armada se producen sobre la Avenida libertad en paradas de colectivos y cajeros automáticos. También sobre la calle UNNE donde hay departamentos y pensiones universitarias: todo el tiempo son blanco de robos tanto en la vía pública como dentro de las propiedades.
 
Barrio Víctor Colas
 
El reclamo de los univeristarios también se extiende al barrio Víctor Colas y sus habitantes ya que es otra zona caliente del delito. Hace 10 días atrás vecinos de esa barriada y de cuatro más: Juan de Vera, Apipé, Jardín e Industrial, se reunieron con autoridades policiales para pedir por más seguridad.
 
La respuesta fue que llamen al 911 y bajen en sus teléfonos celulares la aplicación de “seguridad del gobierno de la provincia”.
 
En el barrio San Jerónimo en la jornada de ayer una estudiante fue violentamente atacada por motochorros, la arrastraron varios metros para quitarle su mochila.